¿Cómo estás?. Con sumo placer te saludo de nuevo y te invito a que te acomodes y te abstraigas  de todo lo que  no seas tu mismo en este momento para compartir estas líneas.

Comienzan los créditos y por fin el título: ”Forrest Gump”. Sí, la cosa va hoy de “películas”…¿ficción o realidad? Podemos “retratarnos” más en unas “pelis” que en otras dependiendo de nuestro “chip mental”, lo que en lenguaje coloquial  llamamos “experiencias”.

Luces, cámaras, acción…

Pues sí, aunque parezca raro no había visto esta película entera hasta el otro día, la archiconocida y oscarizada “Forrest Gump”.

Me impactó su sencillez y a la vez su complejidad. Si tuviera que definirla lo haría con una frase muy usada por mí desde hace años: ”todo es posible”.

Magistral y naturalmente descubre  Forrest, el protagonista, la fuerza sobrehumana de sus piernas para huir en un momento concreto de “supervivencia y defensa”. ¡La vida siempre tan sabia, poniéndonos aparentemente al límite..!

Dale la vuelta a las circunstancias y haz de cada reto una oportunidad

De su discapacidad mental surge su ventaja, una mente limpia de contaminaciones, envidias y maldades  que le brinda múltiples oportunidades y momentos vitales de gran valor, entre el  aprendizaje y  el descubrimiento, maestro en darle la vuelta a las circunstancias y de hacer de cada reto una oportunidad, permitiéndole a todo el que se relaciona con el  nutrirse de su generosidad a raudales ¡que bonito es ser sin pretenderlo, hacer fácil lo aparentemente inalcanzable, vivir con la entrega y la espontaneidad de un niño! Y como todo en este mundo son polaridades frente a la inocencia del protagonista impacta la crueldad de otros niños de su edad, grandes maestros para Forrest, son estos los que en un momento de persecución y mofa impulsan al protagonista a romper a correr, ”rompiendo” también los aparentes límites de sus piernas.

El propio Forrest queda tan impactado con su recién estrenada capacidad que hace suyo el imperativo “corre, Forrest, corre”. Sin saber por qué pero empoderado desde “ese otro yo” recién descubierto decide correr siempre, da igual que lleve prisa o no, da igual que vaya a la escuela o a su casa, corre y corre porque se siente libre, quizás porque se siente a salvo, hasta que un buen día sin más para y en ese mismo instante cae en la cuenta de que es de el mismo de quien quiere escapar y decide que YA NO TIENE SENTIDO CORRER MAS. ¡Como me identifico con esto,Dios!. Supongo que muchos de vosotros que estáis aquí leyendo en este momento también.

El lenguaje de nuestras emociones

Centrándonos un poco más en la personalidad de nuestro personaje dejo abierta la siguiente reflexión: si ponemos en una balanza ¿quién triunfa y es más FELIZ  el inteligente emocional o el inteligente académico?. Mis queridos, ¿no os parece que el lenguaje de nuestras emociones debería ser de obligado cumplimiento desde nuestra más tierna infancia?. Forrest, procedente de una familia tildada como disfuncional (solo vive con su madre, sin saber ni siquiera quién era su padre), cuenta con un apoyo emocional sin límites por parte de su madre, quién de forma continuada le enseña con su propio ejemplo, hace que su hijo compense con creces su aparente discapacidad mental con una inteligencia emocional  más que de manifiesto y aplicada durante todo el film con auténtica maestría. Brillantes sus mensajes de cómo navegar por el mundo con paz y no morir en el intento.

¡Qué importante es conocer las reglas para de vez en cuando “navegar a nuestro ser”! Si me dices que para ti 2+8 son 12, ¡perfecto!. Esa es tu verdad y yo la respeto, ¡igual has creado una nueva forma de sumar y no lo sabes!

Verdades hay tantas como personas

¡Cuantísimas veces nos empeñamos en llevar la razón!. A estas alturas de mi vida tengo “cristalino” que verdades hay tantas como personas. ¡Si yo fuera tú y caminara con tus zapatos actuaría igual que tú!. De ahí surge la auténtica empatía. La inteligencia emocional es la maestra para que la ecuación sea siempre equitativa entre Tu y YO.

Con el corazón lleno de gozo y emocionada terminé de ver esta película . A través de los  ojos de Forrest, personaje que encarna , como ninguno, el camaleónico Tom Hanks, quedan  completamente  al aire el alma y la sensibilidad de un discapacitado mental con un espíritu repleto  de mensajes cum laude acerca de qué es importante en esta experiencia vital y qué es accesorio. ¡Chapeau, me quito el sombrero y aplaudo a todos los “discapacitados mentales“ que transitan este mundo y se erigen como vivas voces del amor, la bondad, y un ”saber hacer” dignos de elogio!

?

 

¿Te gustas cuándo te asomas al espejo?
¿Se te ha ocurrido pensar alguna vez que la imagen que crees que el espejo te devuelve quizás no se corresponde con cómo los demás te ven? 

Espejito… espejito

A mi modo de VER todo es una cadena: me miro y dependiendo de cómo me calibro internamente así emito veredicto, que puede ir del “estoy horrorosa hoy ….no tengo un pase…” al “que mona, por Dios”, pasando por el “ni frío ni calor, sosita, tela”. Como puedes observar, dependiendo de la dureza o flexibilidad de nuestras programaciones mentales, nos calificaremos a nosotros mismos: de “víctimas de nuestras miradas a nuestros más ferviente admiradores”.

Es evidente que vamos cumpliendo años y en la sociedad en la que vivimos el costo de la arruga y el michelín es altísimo…te lo dice una que a los 35 apuntaba:  ”¿qué voy a hacer cuando me salgan canas”? ”¿qué voy a hacer cuando el molesto michelín por pequeño que sea se aposente por encima de las braguitas al sentarme? ¿qué voy a hacer cuándo el resultado de “sonrisas y lágrimas” comience a hacer estragos en mi cara?

Y llegaron los 40 y también los cuarenta y todos y con todo ello llegó la dualidad existente en todo desde que el mundo es mundo… ¡bendita dualidad que me trajo la experiencia y bendito michelín, mantenido a raya, eh!,  que tampoco se trata ahora de “ancha es Castilla”…

Tengas la edad que tengas

Tengas la edad que tengas, estarás de acuerdo casi con total seguridad en que para llenarse de experiencias hay que vivir íntimamente las emociones  y reír con ganas y llorar también con ganas, ya que sin la experiencia de la una no se pude valorar ni conocer la otra….si no te “mojas” más temprano lo harás más tarde, créeme, la vida te pone a prueba, casi te habla al oído: ”la elección está en tu mano, desde tu libre albedrío te acompañaré pacientemente, hasta que decidas DESPERTAR, si no es en esta vida será en otra con otro nombre, con otro “disfraz”, otros amigos, otra familia….como ves creo que cuando dejamos este cuerpo que se nos da prestado al nacer la energía que somos “pide nuevas oportunidades, tantas como el alma necesita para recordar su propósito, para trascender a través de la experiencia. Es libre estar de acuerdo con esto o no mi querido compañero de lectura.

En fin, vuelvo al eje central de este post, como verás, ¡tengo una facilidad infinita para divagar..!

El espejo siempre nos devuelve la imagen que queremos ver

El espejo siempre nos devuelve la imagen que queremos ver, desde nuestra elección consciente o subconsciente, nuevamente las polaridades, ¿lo ves? Vamos de una polaridad a la otra… equilibrando como funambulistas en la cuerda floja… para encontrar ese punto medio tan ansiado de equilibrio… y como seres humanos que somos hacemos gala de nuestra incoherencia y buscamos el  “desparrame” ese necesario para sacar los pies del tiesto, que no es más que la búsqueda de la nueva experiencia necesaria para el avance… y vamos un paso más allá y avanzamos un pie adelante y el otro detrás por esa cuerda floja del viaje vital, vaciándonos y llenándonos en un vaivén de emociones, y nos aventuramos a caer, a veces sin red, en esos momentos de incertidumbre absoluta que respiramos cuándo el cambio que ansiamos es desde la base.

Somos dualidad

Somos dualidad, y nos guste o no si queremos llenar más el cubo y el cubo está hasta el borde es necesario vaciar primero el contenido de ese cubo de “ensayos y errores” para volver a llenarlo con nuevos experimentos y aceptar la dualidad física, emocional y mental que está en todo. Queremos adelgazar para poder volver a engordar un par de kg sin remordimientos, reímos hasta dolernos la barriga para así asumir mejor los momentos de tristeza, pensamos en cuántos plazos nos quedan por pagar del iPhone nuevo, ¡anda, si termino este mes, que liberación! para inmediatamente volver a encadenarnos con la compra a plazos de un nuevo coche… así somos duales e incoherentes… maravillosos humanos elegidos para surfear las aguas de la vida! ?

 

Magia, estrellas, energía, AMOR…sí, siempre el amor como el motor de la vida, el amor está en el aire, el amor lo mueve todo, siempre es la mejor opción y la única respuesta.

Acomódate en tu butaca de espectador…¡preparados, listos, ya!…¡qué empiece la magia!

¡Hago chas y aparezco a tu lado!

Soy de esa generación que creció y vibró con el pop español de los 80, entre otros… Pues bien, te sigo contando, esta mañana me sorprendo a mí misma tarareando espontáneamente el estribillo de uno de esos temas ochenteros ”cuándo crees que me ves cruzar la pared… nananana”. ¡Ya estoy escribiendo otro post!… me pregunto ¿qué ilustración me gustaría para apoyar el sentimiento de estas líneas?

Pienso… no me inspiro…¡qué raro!. Miro de lado y me río yo sola, mis ojos se posan sobre una de mis colchonetas, ¿adivinas..? Sí, la compré hace unos meses por internet, me encapriché de una colchoneta con fondo de estrellas y la encontré…jajaja ¡qué risa!…¡quién me iba a decir que además de para conectar con mi cuerpo cada día la utilizaría como inspiración para escribir!

Móvil en mano la inmortalizo ¡me encanta!, ¡gracias, universo, siempre me ayudas y me inspiras!

Creo y Confío

Volviendo a la  canción de Alex y Cristina, seguro que algunos de vosotros, los de mi generación sobre todo, los recordáis….tendría yo unos 16 por entonces… juventud, sueños, magia, primeros amores… ¿te puedes creer que vivo el amor AHORA como si tuviera esa edad? Así soy, afortunadamente, las mismas ganas con el doble de experiencia… ¡ecuación perfecta! Te cuento mi secreto; CREO y CONFÍO, hasta la médula en el amor. Pongo entusiasmo y cariño en todo lo que pienso, digo y hago desde que me levanto hasta que me acuesto. Ya se que estarás pensando, ”menuda trabajera”. No te lo voy a negar pero entre freírme los sesos con negatividad y mensajes autosaboteadores, y tomarme el tiempo en domesticar mi mente, créeme que elijo la segunda opción sin pestañear.

Centrémonos ahora en eso que conocemos como amor romántico, amor de pareja, ese amor que se desvanece en un tris si no somos capaces de humanizar. Ese amor que para crecer, evolucionar y perdurar en el tiempo necesita de grandes dosis de cuidados a diario, cariño, comprensión y respeto… y, aunque este muy manida la expresión, todo empieza por uno mismo, ¡qué verdad más verdadera!.

Me jacto de ser una gran amante del amor Siempre creí en él pero no ciegamente sino con los ojos bien abiertos. Desde que abrí bien los ojos y me “desperté”, pude ver con nitidez la verdad del otro, que también es la mía, cuánto más me abracé más y mejor pude abrazar, cuánto más me quise más fui capaz de querer, con un amor de calidad. Recuerdo perfectamente el momento en que decidí ponerme manos a la obra y cultivar activamente

¡Maravilloso momento que me trajo un antes y un después!

En mí todas las cualidades que quería ver en mi pareja ¡que espejo para mirarme tan certero! ¡Maravilloso momento que me trajo un antes y un después!

Ahí cesaron las exigencias para conmigo misma y por consiguiente cesaron también las exigencias proyectadas en el ser amado. Desde la abundancia reparto y comparto con amor del bueno, desinteresado, por el mero gusto de dar, sin estar con el contador preparado para ver cuánto doy y cuánto me devuelven desde  la necesidad y la carencia. Desde el AMOR PROPIO crecí hacia el AMOR SANO. Ese AMOR con mayúsculas verdadero y profundo, manteniendo viva la premisa “si yo soy así imperfectamente perfecta, me muestro desnuda de alma y corazón, ¿será que pueda, por fin, atraer y abrazar el auténtico amor?

El amor existe

Y llegó… y nos reconocimos… fácil, como es el amor, cuándo de verdad es AMOR, mágico. En secreto te diré que tuve muchas “señales del universo”, esas que están a nuestro alrededor continuamente y nuestro libre albedrío decide si atender o ahogar. Mi intuición iba dejándome “miguitas de pan” como a Pulgarcito…Hasta que una noche de abril nos encontramos… nuestras almas se reconocieron al instante, mi cuerpo vibraba de la cabeza a los pies ¡chas, apareció a mi lado!

Con la incertidumbre de no saber si volveríamos a vernos pero con el inmenso agradecimiento a la vida de haberme  dado la oportunidad de constatar que yo estaba en lo cierto ¡EL AMOR EXISTE!.. Y la vida dijo “SI”… y “somos  felices y comemos perdices”. ¿Sabes cuál es el secreto?…Cada día construimos nuestro palacio de sueños y estrellas con los ojos bien abiertos para no dormirnos, corazón con corazón, mano con mano, volamos alto, manteniendo nuestra esencia individual y creando nuestro jardín del edén a nuestra medida cada día.

 Y colorín colorado, este cuento que es realidad, continúa con capítulos nuevos cada día. Espero lo hayas disfrutado y te animes a construir tu propia historia con los ojos bien abiertos. BESOS ?

 

Coge tu almohada favorita y ábrete a la inmensidad del “todo es posible”…cierra los ojos físicos y pasa al mundo mágico de tus sueños

Como cada día, hoy, también me acompaña mi ritual: me levanto, me sumerjo y saboreo mi espacio de observación interior consciente, desayuno y hago la cama. Al estirar la sábana de abajo me retrotraigo por unos instantes a mi más tierna infancia cuando mi madre con sabias palabras me apuntaba: ”el orden en tu cuarto es el orden en tu cabeza”… ¿a qué te da la sensación, como a mí, que cuando tienes la cama hecha todo empieza a encajar bien en el comenzar del día? Pues bien, terminando de dar los últimos toques a la colcha y al colocar todos los cojines que ves en la foto, mi vocecita interior me susurra: ¡cuántos sueños hechos realidad guardan esta cama.. cuantos sueños cumplidos mientras dormías!

Sueña incansable…porque los sueños son la vida

Corro a coger mi móvil para captar la instantánea de mi cama… ¡comienza la puesta en escena de mi siguiente post!

Vida, sueños… divago… mi mente entusiasmada llega hasta el barroco Calderón De la Barca y su teatral “La vida es sueño” cuya temática central coincide 1000×1000 con el enfoque que estas lineas quieren transmitir; libre albedrío vs destino, plenitud y libertad del ser humano vs dictados sociales…

Dejo sobre el papel las siguientes reflexiones y te invito a desmenuzarlas.

¿No serán los sueños pasiones reprimidas que claman por ver la luz y convertirse en realidad?
¿Será que los sueños nos dan claras pistas de hacia dónde reajustar la brújula para redefinir nuestro rumbo vital?
¿Somos quizás creadores de nuestro destino?
En mi vivencia de observación respondo con un rotundo ”SÍ… así lo siento y así lo vivo.
¿Te ha pasado alguna vez que has tenido un sueño tan real, tan preciso que te has dicho en ese estado de duermevela-ni despierto ni dormido-” un poquito más…”?

Y como la vida siempre tiene dos caras, cedámosle también, con mucho amor, el espacio a esos sueños que calificamos de poco placenteros, que ciertamente lo son a veces o así los vivimos.

Esos sueños aparentemente sin sentido que mezclan enrevesados personajes y situaciones, esos son indicadores inequívocos de que nuestro subconsciente quiere comunicarnos algo… un camino de salida hacia una realidad mejor.

Esos que llamamos “malos sueños o pesadillas” (véase como nosotros mismos los tildamos y enjuiciamos) sacan a la superficie miedos y heridas encubiertos desde lo más profundo de nuestro SER. Especial atención, mis queridos compañeros de camino, a esos que se repiten una y otra vez.. Os aseguro que si tenemos la constancia y la voluntad de intentar recordarlos y abrirnos a esa CONCIENCIA QUE TODO LO SABE, iremos desentrañando poco a poco, con cuidado y mimo, el significado del mensaje, pasito a paso, llegando al núcleo de nuestras heridas… esas que nos impiden avanzar hacia nuestros más elevados anhelos.

Estamos aquí para escribir nuestra mejor “obra de teatro” y no sólo para dejarla escrita en una libreta y arrumbada en un cajón…¡Aceptemos con alegría y valentía el reto de pasar por esta experiencia física que se nos ha regalado como auténticos guionistas de nuestra existencia!

¡Abre los ojos a los sueños!

¡Abre los ojos a los sueños …vive, ríe, llora, entusiásmate, siente miedo, duda… busca los pasos que te encaminan hacia tu realidad, esa que quieres experimentar, al fin y al cabo ¿qué es sueño y qué es realidad? ¿Quién lo determina?

En mi modesta opinión, por si algo pudiera aportarte, LA VIDA ES SUEÑO…como decía Calderón. El día en el que deje de soñar habré completado mi ciclo vital, así lo siento… pero mientras sí y mientras no… sigue abriéndose el telón cada mañana, así es como entiendo la vida, desde el mágico despertar cargado de sueños tan reales como yo me permita que sean.

Desde este espacio de confinamiento que vivo y he vivido como regalo para hacer un cambio estructural de mi vida, de mis sueños, de mi rumbo, afirmo que la única distancia entre los sueños y la realidad son nuestros MIEDOS… Los abrazo y me impulso desde ellos, una vez más, hacia mi mejor versión.

Hago BALANCE-IN de mi vida y apuesto por seguir SOÑANDO Y CREANDO -sumo y sigo-

¿Te vienes?

?

 

¡Pasa..! Este espacio siempre está abierto para ti. Ponte cómodo y toma asiento. Comienza la puesta en escena. Te cuento…

Puede ser que te preguntes: ¿qué relación tienen la foto de las “gominolas” y el título “quiérete bien…para querer mejor”? Con toda la razón te lo preguntas. Ahora hago el “desplegable” y verás cual es el hilo conductor.

El otro día, en una de esas salidas casi de “estraperlo” al supermercado y viendo “mascarillas van y vienen”, mis papilas gustativas comenzaron a activarse al pasar por delante de unas apetecibles bolsas de gominolas. ¡Que ricas..por Dios!… ¡al carrito! Bueno, pues llego a casa, coloco y bla bla bla …vamos, lo que todo hijo de vecino hace al llegar de la compra. Con las “chuches” tengo la costumbre infantil de abrir el paquete y ponerlas a la vista en el entremesero de cristal que ves en la foto… ¡Me encanta! Me da la sensación de que vuelvo a esos maravillosos años de la infancia en que celebrábamos los “cumples” en casa… Ese olor a puro azúcar…a risas…a despreocupación, a libertad. ¡Qué bonito es evocar esos momentos y revivir esas emociones!

Me “fui” por un tiempo (no sé si fueron 10/15 minutos) a “volar en libertad”. Cuando “volví” de mi viaje maravilloso pensé : ¡”cómo me gusta!…me pongo en acción con mi próximo post….¡a escribir”!
Ahora viene el momento de verdad en el que tienen sentido la foto y el título que he elegido.

Mother´s Day

Día siguiente, pasado domingo, primer domingo de mayo… celebración del “Mother´s Day”, onomástica de todas las madres y para mí, de todas las mujeres. Recibo, emocionada, felicitaciones de mis dos hijos; el mayor vive ya independiente, 24: “Feliz día, mamá. Te quiero”. Mi hijo el menor, 19, madrugada del sábado al domingo, 00:00 desde casa de su padre me escribe: “Feliz día de la madre, mami, eres la mejor madre que me podría haber tocado. Te quiero mucho”.
¡Cuánto hemos aprendido juntos…y por separado…más todavía! El camino ha sido largo hasta llegar aquí…pero ha merecido la pena …¡y tanto!

¡Ay si nos dejáramos llevar más por esa voz que siempre acierta, esa voz interna que nos guía a cada paso! ¡Que inmenso es el confort de seguir adelante, puede haber baches, ciertamente los hubo y los habrá, quizás…Un paso adelante y otro más, incluso por sendas oscuras, esas son las mejores, nuestros grandes maestros que nos hacen subir otro escalón arriba. Y se aprende, claro que se aprende. Me mantuve firme, alineada con esa sabiduría interior… permanecí confiadamente. AHORA estaba de nuevo la vida diciéndome: ”Aquí tienes pruebas irrefutables, hechos consumados, lo hiciste bien, te mantuviste contra viento y marea…toma más regalos…te los mereces”. Nos enriquecimos mutuamente y aprendimos a respetarnos y a querernos bien. ¡Que satisfacción! Me sentí y me siento plena de felicidad.

Querer; que bueno es querer con responsabilidad hacia uno mismo, ponernos en nuestro sitio cuando sabemos que hay que hacerlo. Decidida y actuando desde el ”primero yo”, saltándome a piola las ataduras del “que van a pensar”, “ como voy a ser así”, “debo sacrificarme”… y todos esos dictados sociales y programas que han ido pasando de generación en generación y que hemos afianzado como verdades absolutas sin pararnos a pensar: ¿es justo para mi?, ¿será que también tengo algo que decir?…¡que egoístas son los hijos…! Queridos míos, una vez más el dedo indice apunta hacia nosotros con una claridad meridiana. ¿Te mantienes firme? ¿Hablas de tus necesidades con la gente que amas? ¿Tú te quieres? Y la pregunta del millón: ¿Eschuchas tu vocecita interior o le “tapas la boca ahogando su mensaje” ?

“ Quiérete bien…para querer mejor”

La única manera posible es grabar con profundo respeto en nuestro corazón el siguiente credo: “Amarás al prójimo como a ti mismo”. Sólo desde ahí puede construirse una autentica relación de amor desinteresado, respetuoso y dulce.
¡Empieza por ti, si te amas bien, amarás y te amarán mejor!
¡Haz tuyas estas reflexiones!
¿Recuerdas que dicen la azafatas al dar las instrucciones básicas de seguridad? : “en caso de despresurización de la cabina se abrirá automáticamente un compartimento, las máscaras de oxígeno caerán delante de ti. Primero ponte la tuya y respira, luego puedes ayudar a los demás”.

Sé valiente y sincero contigo mismo…es muy fácil caer en victimismos o beneficios secundarios.
Desde el victimismo alimentamos el “me hizo esto/ me dijo lo otro, no puedo hacer nada…”¡Para y reflexiona!: ¿Quieres quedar atrapado como el hamster en la rueda o quieres salir fuera de esa rueda con la fuerza del “just jump”?

Desde el beneficio secundario podemos intuir las huellas sospechosas del control hacia los demás, de manera que preferimos seguir en nuestro ”modo de sufrimiento y queja”, nuestra zona conocida, en vez de atrevernos a no ser necesarios para nadie, salvo para nosotros mismos.

Cojamos “el toro por los cuernos” y hagámonos responsables de nuestras vidas, construyamos desde nuestro “yo” y démosle la valiosa oportunidad a los demás de aprender a elegir cómo quieren construir los suyos .

Amor incondicional…hacia nosotros mismos primero… QUIÉRETE BIEN… PARA QUERER MEJOR.
?

En uno de esos momentos frecuentes en mí de “papelera mental vacía” para imaginar libremente, vino sin más, la imagen de una oveja negra. De esa imagen mental  fluyeron en un segundo las asociaciones desde mi disco duro. Se “dispararon” instantáneamente términos como; diferente, libertad, romper moldes, salir de lo institucionalizado, atreverse. La frase vino sola “Me atrevo a ser”. A renglón seguido, golpe de tuerca más, me pregunto; ¿será que hay todavía ovejas más “raras” que las negras?… “¿qué tal ovejas en mi color favorito, el naranja?”. “¿Será que habrá alguna ilustración de ovejas naranjas?…seguro que existen…”

Curiosa como una niña me fui a Google y tecleé: “ilustraciones de ovejas de color naranja libres de derechos de autor”. Tras pasar y pasar páginas, aparecieron: ¡maravillosas…tres, eran tres, con un pelaje naranja fantástico! Inmediatamente pensé: “han superado la rareza de las negras” (coincidirás conmigo en su singularidad…véase la foto que apoya el texto).

Estos son los preliminares que me llevaron, sin buscarlo, a elegir el título de este tercer post de mi blog que tengo el gusto de compartir contigo ahora.

Me atrevo a ser

“Me atrevo a ser”. Llegar a este “permiso”, sintiéndolo con fuerza desde dentro, es posible ahora. Todo pasa por una reescritura de aquellos sucesos de nuestra vida que en algún momento nos lastimaron y quedaron “clavados”. La vida, con gran sabiduría, los pone en nuestro camino, una y otra vez, hasta que, exhaustos de sufrimiento nos disponemos a apuntar con el dedo hacia nosotros, hacer la lectura pertinente y volver a reescribir, a pintar como en un lienzo en blanco, nuestra nueva visión sanada.

Y avanzamos, con la completa seguridad de que aparecerán nuevos escollos que salvar, nuevas dificultades con las que aprender, nuevos puentes que cruzar, ¡es el peaje maravilloso que hay que pagar por estar vivos, el abrazar cambios e incertidumbre!

Aquí estoy contigo

Aquí estoy contigo, te tiendo la mano desde la experiencia en primera persona, mutuamente nos nutrimos…como yo hice en su momento… me rendí a la evidencia y en un momento determinado me pregunté:”¿por qué se repiten una y otra vez ciertos sucesos en mi vida?”. Personas que parecen recordarme el dolor, el miedo, la falta de autoestima…¡benditas personas, benditas circunstancias!…me indicaban en letras MAYÚSCULAS subrayado y en negrita MIRA HACIA DENTRO. Eran y son valiosísimos maestros que vibran en nuestra misma frecuencia, maestros que irremediablemente nos obligan a salir de nuestra zona de confort (aunque el confort sea doloroso, es conocido…), a menos que elijamos perpetuar el dolor, en cuyo caso “repetiremos “una y otra vez. La elección siempre es nuestra.

Desde mi experiencia en primera persona, por si te pudiera servir, afirmo que es derecho de todo ser humano, rayando casi en lo “obligatorio”, atrevernos a ser… lo que queramos ser, romper moldes, saltándonos “como ovejas naranjas” los dictados del “…esto debe ser así o asá”… La única condición para ir ligeros de equipaje en este viaje es PERDONAR. Avanzar desde un espacio interior cuidadosamente observado y curado. El paraíso está aquí, si queremos que esté. Si la vida te da una llave inglesa, un martillo y un destornillador tienes dos opciones: a) “¿y con esto que puñetas hago?”, b) ”¡que suerte tengo, tengo tres herramientas!”.

¡Construye!

¡CONSTRUYE!, siempre poniendo el acento en la ventaja, siempre mirando de cerca el agradecimiento.Es desde ese espacio de gratitud desde el que podemos avanzar, reescribir los episodios de nuestro libro más difíciles, desde el perdón hacia nosotros mismos primeramente, ardua tarea ésta, pero se puede.

¡Y tanto que se puede!, paso firme y adelante dando gracias con el corazón abierto y lleno de curiosidad.

¡Atrévete a ser, atrévete a romper moldes..! ¿Qué quieres hacer? ¿Qué te apasiona?. ¿Sabes ya cuál es tu propósito de vida?…da igual que tengas 18 años o 90, ¡siempre hay una oportunidad para sentirte mejor en tu yo!. ¿Te gustaría enfocar tu día a día como un juego de disfrute lleno de color  y entusiasmo o prefieres enfocarlo como una obligación gris y aburrida?

¡Pasa, la puerta está abierta de par en par para ti… BALANCE-IN… tu voz interior, te llama a gritos para que la atiendas. Atrévete a ser diferente. Traza tu  propia hoja de ruta!. Por favor, créete merecedor de todo lo bueno que la vida tiene para ofrecerte. La única distancia entre TÚ Y TU MEJOR VERSION está en tus programas mentales. ¡Resetea, comienza de nuevo, el tiempo es AHORA!. Eres libre, abre tus alas y vuela alto…tienes mucho que decirle al mundo. Es tu momento para nutrirte de la vida y nutrir a los demás con esas cualidades únicas que sólo tu posees, esas cualidades que te hacen ser Tú y no otra persona.

¡Adelante…voy CONTIGO!

¿Preparado para descubrirlo?

¡Atrévete a ser! ?

Parafraseando el bello tango de Gardel “Volver”, así comienza este segundo post de mi blog, este espacio muy íntimo que me encanta compartir con vosotros, basado en hechos tan reales como la vida misma.

Esta mañana temprano, al abrir el cajón de un mueble del salón saltó a mi vista una foto que hacía un siglo que no veía (foto de la derecha) ¡Madre mía….cuánto ha llovido!. Cosas del azar…otra foto mía algunos telediarios después viene a mi mente (foto de la izquierda). La busco y se me ocurre ponerlas juntas en una composición. Observando la más antigua, en la que tengo, como se suele decir “la edad en la boca”, me voy en un tris a mi archivo mental…increíble!. Mi  disco duro me transporta en un abrir y cerrar de ojos a escenas concretas de aquella época de mi vida…todavía quedaban casi 2 para la treintena, estaba en pleno cambio de década, y como me ocurre en cada cambio de década, (según vengo observando), estaba en pleno borboteo de toma de decisiones en lo personal y en lo profesional.

Método Balance-In

Estuve un buen rato “volando” de nuevo a esa etapa de mi vida.  Es increíble como funcionan nuestros programas mentales… Tecleando un simple” botón visual” (foto), vinieron de manera clara hasta mí, escenas del pasado, personas, olores y como si de una película se tratara, me vi reviviendo de nuevo ese “antiguo yo”.  Como es lógico me topé con escenas mas agradables y otras un poco menos…así que me apliqué, de inmediato el ya familiar para mi “enfócate en lo que no te gusta y reescribe tu guión centrándote en cómo te hubiera gustado que fuera, visualización asociada con emocionalidad como parte del reseteo mental (método Balance-In).

¡Fue mágico! Al reescribir el nuevo guión y enfocándome en cómo me hubiera gustado asociándole una emoción acorde, había conseguido cambiar el “signo del recuerdo”,  de poco agradable a placentero.

“20 años no es nada”

Observando AHORA la foto más reciente (foto de la izquierda), sigo siendo aquella aventurera, aquella joven llena de entusiasmo con las señas HOY de la experiencia y las asignaturas aprobadas. Soy la misma pero “promocionada”, afortunadamente.  Aupada desde la experiencia hacia un “mejor yo”, con las mismas ganas y con un equilibrio emocional fruto de años de auto observación, estudio y valentía. Valentía para mirar cara a cara mi yo menos agradable, aquellas partes internas dañadas por el proprio devenir  de la vida… y si, como decía Gardel 20 años no es nada” solo mi madurez emocional separa estas dos fotos.  De la chica joven con esencia pura que se sentía culpable y no se amaba lo suficiente, a esta mujer madura que soy hoy, dispuesta a buscar un nuevo “érase una vez…” cada mañana.

Elijo mi nuevo yo

Puedo decir, sin temor a equivocarme, que la huida hacia adelante de aquellos sucesos que nos lastimaron sin volver la vista atrás para mirarlos de cerca y reescribirlos, tienden a perpetuarse y repetirse una y otra vez. Así que sin vacilar, elijo mi nuevo yo, sigo abrazando la esencia de aquella joven aventurera de ojos puros y curiosos, y le añado el temple, la observación…a fuego lento, calmadamente, hoy un poco y mañana un poco más.

Respetándome, conociéndome cada día un poco más y profundizando con esmero y delicadeza en aquellas partes más “oscuras” en aquellas en que uno necesita destapar con sumo cuidado.
“¡Es un soplo la vida!” como dice la letra de este hermoso tango.  Así es cómo quiero contar la vida, por vivencias aquí y ahora, momentos.

Maravillosa oportunidad se nos brinda, el poder ser los arquitectos de nuestras propias vidas
Darnos la oportunidad de vivir esta experiencia terrenal en primera persona, avanzar con el alma y el corazón sanados y fuertes, para seguir escribiendo “guiones” hasta el final…entonces habrá un nuevo COMIENZO.
?

Desde pequeñita me he guiado por mi intuición. Esa vocecita interior que nos lleva a subirnos a ese tren que anhelamos…aunque, a veces, nos de vértigo subir. Pues bien, esta vocecita vino a “visitarme” el segundo día de “meditación involuntaria” que todos estamos viviendo y me dijo: “¿y si te atreves y pruebas a acompañar a tus clientes online?”…y además…“¿que hay de ese proyecto de abrirte al mundo y traspasar fronteras y límites tanto personales como físicos?”.

A la mañana siguiente puse  “nuevo rumbo” a mi proyecto…con miedo… “Sí”, pero con la valentía y la confianza de lanzarme a un “mar de posibilidades”… “la vida me va a ir dictando cada día”, me dije.

Cómo he llegado hasta aquí

Me puse manos a la obra y, como por arte de magia, como si alguien estuviera susurrándome el guión a través de unos auriculares, vinieron, logo, colores, palabras, ideas estructuradas…Las sensaciones me entusiasmaban. Me sentía  como una niña, sorprendida…las mariposas en el estómago subían y bajaban. ¡Quién me lo iba a decir! (quién me conoce sabe lo poco tecnológica que he sido…hasta ahora, claro). Sin darme apenas cuenta me vi grabando, escribiendo, publicando para redes sociales…. la vida me daba por un lado el entusiasmo de “los zapatos nuevos” y por otro ponía a prueba mi paciencia y mi tolerancia a la frustración. Poniendo mucho amor en todo lo que iba desarrollando  y “mano  en mano” con Oscar (compañero de viaje con quien me siento afortunada de compartir la vida), fui subiendo, “como la espuma en una bañera”, escalón a escalón…cada día un poquito más…cada día se presentaba como un nuevo reto lleno de “obstáculos” que ponían a prueba mi capacidad de aprendizaje, mi apertura a lo desconocido y mi salida, bruscamente, de la zona de confort.

La vida me da la posibilidad de evolucionar y crecer

Empecé a darme cuenta que asociaba cada día de la semana no como estaba acostumbrada hasta ahora (lunes, jueves, domingo), sino que  recordaba cada día en función de las barreras o dificultadas que se habían presentado en ese día y como había sido capaz de solucionarlas. Todo esto me llevo a decirme a mi misma:”la vida,en esta situación complicada que todos estamos viviendo, me da la posibilidad de evolucionar y crecer, sólo si estoy dispuesta a comprometerme con el “sí quiero” y salir de mis programaciones limitantes”.

La vida se muestra bondadosa, me da el soporte, me aúpa hacia el “todo es posible“…si yo lo creo en mi mente, lo creo en el exterior, el agradecimiento me acompaña cada día, el amor hacia mí misma, me doy permiso para crecer a mi ritmo y me doy cuenta, emocionada, que cuando apuesto por el “adelante vamos”, la vida me hace un guiño y me dice: “yo también apuesto por tí”. ¿Sabes por qué?. Porque la primera que apuesto por mí soy yo…y me permito, me concedo, me abrazo y me amo…tal y como soy, perfectamente imperfecta.

¿Somos responsables en primera persona de cómo nos sentimos?

Dejo abierta la siguiente reflexión en este primer post de mi blog: “¿Somos responsables en primera persona de cómo nos sentimos?”. Por si te resulta útil te escribo como lo siento yo. Te diré que desde que dejé de estar a merced de la opinión de los demás soy y me siento libre, me han crecido unas “preciosas alas” de las que me siento muy orgullosa. Desde que un buen día uní todas las piezas del puzzle y dije: “¡eureka!”. No necesito la aprobación de los demás… ¡Me apruebo yo!.. Aunque pueda parecer básico para mi fue como el descubrimiento de la pólvora.

Para ir terminando, quiero agradecerte que dediques este tiempo tuyo valiosísimo a leer estas palabras escritas desde el corazón. Gracias por estar aquí. ¡Comienza nuestra aventura juntos!

Te escribo muy pronto

?

Mi agradecimiento personal a Elio Estudio.